
Jajaja. La ironía de esta risa que especula un provenir coherente. Patrañas. Te das contra la pared y me asfixio en carcajadas. Mejor me aferro a un porvenir real. Mejor pega los labios al poste de la esquina, a un metal que te desnuda; lloras y olvidas como reír, deseas recordar como respirar sin gemidos absurdos, como volver a empezar los segundos vanos, evitar que sigan siendo tantos, empezar a que comiencen a ser vagos. Jajaja. Y la risa crece. JAJAJA. Y no deja de crecer (y parece que nos vamos olvidando de la cordura).
Huimos de la mano por una banqueta que de pronto parece dar vueltas, las bardas tapizadas de arte callejero, cholo pintarrajear de esta vida insulsa, de esta alegoría de pasajes que amedrentan el raciocinio de los monstruos rebeldes con ideas bien pinche locas sobre el fin del mundo y sobre niñas violadas, sobre el cáncer, sobre las ETS y cuanta mamada más (de las mamadas también), de los ciegos y de las absurdas mañas, se derriten como queriéndose derrumbar sobre nosotros mientras vamos corriendo, sin soltarnos la mano, porque van tan unidas que parece que uno se va a quedar con la piel del otro. Y te veo transparente, tan invisible que comienzo a morir de miedo, porque siempre pensé que era imposible desaparecer conservando lo tangible, tan tocable y entrañable que persiste a pesar del tiempo, tan extrañable al grado de hacerle el amor, de escucharlo susurrar a lo lejos de los años, de humedecerte con la transpiración de sus recuerdos vagos, de sonreír cuando te muerde la oreja, cuando pasa su lengua sobre tu bulto, allá entre los muslos, tan tangible, tan vivo el recuerdo, que a pesar de un lustro eres capaz aún de orgasmearte con sus manos a través de las tuyas.
Tal vez no fue miedo de lo que comencé a morir, sino de una creciente emoción que no pude contener.
¡JAJAJA! Y no deja de crecer.
Parece que la cordura se va olvidando de mí.
Si te vi transparente, es que yo ya me había vuelto loco.
*0* Me fascinó, me trajo recuerdos T-T
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